Comentarios
La figura del animal ocupa todo el ancho de la tela, imponiéndose como una forma espectral en un espacio plano. Trazos esquemáticos definen su silueta, que aparece envuelta en una atmósfera de grises verdosos y azules con algunos ocres y marrones, en un conjunto que presenta un efecto monocromo, que contribuye a crear en el cuadro una sensación de despojamiento y vaga tristeza. Hace alarde Grandío de esa intimidad con su tierra y con los seres que la habitan, que le es propia, respetando las costumbres y las cosas con las que se la identifica y plasmándolas con su visión de pintor poeta, capaz de dar un sabor intemporal a las cosas.