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Pertenece a la serie "Yo te saludo sol" que comenzó a principios de 1999. Es como una gran acuarela en la que el pintor plasma la luz y el aire con los medios mínimos. Vemos sombras azules que se mueven y cambian de lugar, o ráfagas de luz que cruzan el cielo o la nada. Es una pintura sutil, ejecutada con pincel y acrílico, haciendo que el color vibre sin dejar la huella del trabajo manual sobre la tela, como en las obras de rociado de pintura de Paul Klee. El azul juega con el punteado natural del lienzo que aparece a la vista en zonas que son reservas de luz. La claridad y un tono de frescura son las claves que alientan las obras de este artista de un modo natural y coherente. Recientemente ha sido seleccionado por el CGAC para participar en la Feria de Arco 2.000.
Exposiciones
"IV Foro Atlántico de Arte Contemporáneo" Pontevedra 1999, G. Lepina.